Este que veis aquí, de rostro sencillo, de cabello castaño, frente despejada, de miopes ojos y de nariz que no puedo calificar, es el rostro del autor de dos magníficos hijos y de una vida sin brújula, aunque hecha ya más de la mitad.
Llámase comúnmente Brunel Luc. Fue ingeniero para sobrevivir decentemente en su época, pero también pescador en cualquier día de su juventud, y siempre soñador de que podría ganar su comida.